Maryfer Centeno analiza personalidades de los tripulantes del submarino Titán

Luego de la tragedia donde cinco personas murieron en el submarino Titán mientras trataban de observar los restos del Titanic, la grafóloga Maryfer Centeno habló de la personalidad de los tripulantes.

Según Centeno, eran personas "tan ambiciosas que creen que pueden desafiar a la naturaleza".

Sobre Harding, dijo que ya forma parte de la historia por esta "desafortunada historia", pero llegó a la conclusión de que se firma es la de una persona con mucho orgullo. "¿Cómo es una personalidad que se considera tan ambiciosa que cree que puede desafiar a la naturaleza?"

"Esta es la escritura de Hamish Harding, el inglés que además vive en Emiratos Árabes Unidos y lleva tres récord Guinnes", comentó. "Ésta es la foto del Instagram de Hamish Harding, ve la escritura, muy observador, muy minucioso, muy nervioso, un hombre seguro de sí mismo. Ve nada más la zona media, la escritura hacia la derecha", mencionó.

"Una seguridad en sí mismo a prueba de balas", continuó. "Estresado, de palabra, ambicioso, por supuesto que sí es una obviedad, pero la letra va hacia arriba, muy concreto, de repente hasta simple para sus cosas... el nervio, la adrenalina, la necesidad de vivir a través del deseo. Idealista, un gran conversador. De humor negro, sarcástico, una persona que además muy contenta de ser quien es y de lo que ha logrado".

La también experta en lenguaje corporal se fijó que el hombre escribía su apellido en letras más grande que las de su nombre. Concluyó que aquello significaba la importancia máxima que le daba a su imagen pública y a su "yo social".

"Todos son muy estresados, todos son extraordinariamente inquietos", continuó. "Todos son personas desafiantes, todos son personas que además les gustan mucho los retos, les gustan los desafíos. Son estresados, muy sensuales. La gran mayoría son seguros de sí mismos, muy educados".

Además la grafóloga anotó que sus letras eran muy apretadas e inclinadas hacia la derecha, excepto las de una sola persona. "La excepción confirma la regla", dijo con seguridad y concluyó que las letras de todos los tripulantes tenían angulosidades similares, el mismo tipo de presión al escribir y escritas todas ellas con velocidad.

"Son personas que deben tener coincidencia para arriesgarse a estar 3 mil 800 metros bajo al agua. Vamos, una persona que mide mucho los riesgos, no lo haría", aseguró.